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El dolor lumbar es uno de los principales motivos de consulta en fisioterapia. Si a ello le sumamos que la práctica del golf está cada vez más extendida a nivel amateur, no es raro que parte de los pacientes que acuden a nosotros con dolor lumbar, practiquen este deporte.
Popularmente se considera al golf como un deporte “poco agresivo”, pero no debemos olvidar que hay muchos factores que pueden influir en el dolor, no solo lumbar, sino de hombro, codo, o cadera; como pueden ser las largas distancias que se recorren durante los 18 hoyos, las vibraciones que se transmiten a lo largo de todo el brazo cuando, por ejemplo, se falla en el golpeo y choca el putter (palo de golf) contra el suelo, o las malas posturas al coger la bola o transportar la bolsa de los palos. Mención aparte merece la técnica del swing, la gran responsable de del dolor lumbar y su frecuencia. Diferenciaremos los dos tipos principales de swing (imagen adjunta):
- Swing moderno: en auge a partir de los años 60 – 70 de la mano de golfistas como Jack Nicklaus) ó Greg Norman, se presenta como una técnica que permite, por ejemplo, darle mayor altura a la bola. Se caracteriza por dejar la pelvis rígida y una máxima rotación del tronco y los hombros, generándose una distancia máxima (“factor X”) entre hombros y caderas durante la técnica, una excesiva inclinación lateral (en inglés, “crunch factor”) y una posición de “C invertida”, en la fase final tras el golpeo.
- Swing clásico: la rotación de la pelvis y caderas acompaña a los hombros. En la fase final se mantiene una posición más erguida, evitando la posición de “C invertida”. Aparentemente menos lesivo.
Estas ventajas del swing moderno también parece que se postulan como de mayor riesgo de lesión, ya que se aumentan las fuerzas de rotación, extensión e inclinación lateral de la zona lumbar principalmente, afectando a disco intervertebral, ligamentos, articulaciones intervertebrales y músculos, entre otros. La zona dorsal también intervendría en la rotación, aunque en menor nivel por la estabilidad que le confiere la caja torácica. La cadera también juega un papel importante, necesitando de una gran estabilidad de sus músculos propios (glúteo medio, glúteo mayor).
En aquellos pacientes con dolor lumbar que practican golf, es frecuente encontrar lesiones del disco intervertebral y las articulaciones del lado derecho (lado de la inclinación lateral en golfistas diestros). A nivel de la cadera, podemos encontrar diferencias en el movimiento de rotación entre las caderas, con menor movimiento en la cadera izquierda en el caso de golfistas diestros, comparado con jugadores de golf que no presentan dolor.
Por ello, la importancia de un buen calentamiento, estiramientos y de fortalecimiento de la musculatura lumbar, principalmente de los músculos transverso del abdomen y multífidos, se antojan como requisitos indispensables para evitar la aparición del dolor, o bien iniciar la recuperación. Además de ello, y no menos importante, se deberá cuidar la técnica de una manera minuciosa.
En el Centro Médico y de Rehabilitación Premium Health & Sport contamos con un amplio equipo de fisioterapeutas y preparadores físicos que le ayudarán a su recuperación y a una pronta pero segura vuelta a la práctica deportiva.
Fuentes y recursos de información: