Si el paciente tiene una buena autonomía en el agua y la fase de la lesión es la adecuada, se le puede recomendar la terapia acuática grupal, esto tras una primera sesión individual de valoración con el fisioterapeuta experto en medio acuático.
La terapia acuática grupal no se tiene que confundir con el aquagym cuyo objetivo es puramente el fitness; La terapia acuática grupal está orientada a la recuperación de cada paciente gracias a la realización de una serie de ejercicios en el agua, pautados con fines terapéuticos y personalizados según la historia clínica de cada persona.
Los grupos son muy reducidos y un profesional experto en terapia acuática asignará ejercicios diferentes a cada usuario según la patología y la fase de la lesión.
En este caso, el terapeuta no estará dentro la piscina con los usuarios y no aplicará técnicas de terapia manual en agua, ya que la terapia acuática grupal es más indicada para patologías en fases un poco más avanzadas.
Se realizarán ejercicios utilizando varios tipos de materiales de flotación y de resistencia: los ejercicios de fortalecimiento aprovecharán la resistencia hidrodinámica; los ejercicios de movilidad serán muy eficaces gracias a la flotación, y los ejercicios de estabilidad/equilibrio serán muy seguros, ya que no podemos sufrir caídas lesivas dentro del agua.